Según la revista Greenpeace 1/08
16.000 personas mueren al año en España por efecto de la contaminación atmósferica, y las zonas más industrializadas son también líderes en casos de cáncer. La contaminación no se ve pero está ahí, y pone en grave riesgo nuestra salud.. Son datos del último informe que ha presentado Greenpeace, "La contaminación en España", donde se analiza la problemática actual asociada a tres grandes sectores: la industria, la gestión de residuos y los hidracarburos. En este informe Greenpeace presenta claramente a los agentes implicados, las causas, los casos, el problema y las soluciones para acabar con la contaminación. 2.159 industrias en España vierten más de 1.200.000 toneladas de sustancias peligrosas y contaminantes al agua cada año.
Para solucionar el problema de la contaminación de los residuos sólidos urbanos, Greenpeace propone el modelo de "residuo cero".
Los vertederos, las incineradoras y las cementeras son las principales fuentes de contaminación causada por la gestión de los residuos urbanos. Desde el año 1996 hasta los últimos datos del 2005, el crecimiento total de los residuos urbanos en España ha sido del 46%, y según datos del Ministerio de Medio Ambiente, el 74,3% de los residuos urbanos acaban en incineradoras o enterrados en vertederos. La generación de residuos municipales no deja de crecer a pesar de los riesgos de saturación y contaminación. Los residuos urbanos son una mezcla heterogénea de materiales que pueden contener decenas de miles de sustancias químicas diferentes. Depositarlas en vertederos puede provocar que estas sustancias se liberen al medio ambiente, con el peligro que conlleva para la salud. La incineración de los residuos no soluciona el problema, ya que en el proceso de combustión se producen sustancias más peligrosas todavía; como por ejemplo las dioxinas. Las cementeras se están incorporando masivamente al negocio de la gestión de residuos y los utiliza como "combustibles alternativos". Este proceso genera altos niveles de contaminación tanto en el entorno como en el producto final, el cemento. Para solucionar el problema de la contaminación, provocada por la mala gestión de los residuos sólidos urbanos, Greenpeace propone el modelo de "residuo cero", que ya se está implantando en otros países. Este modelo se basa en aprovechar todos los residuos como materia prima para desacelerar el agotamiento de los recursos naturales. Para lograr este objetivo es prioritario que cambie la composición de las basuras y evitar la utilización de materias primas que se conviertan en desechos no reutilizables o reciclables. El residuo cero implica obligar a los fabricantes a responder de sus productos y envases durante todo su ciclo de vida, incluyendo su correcta gestión. De este modo, los nuevos planes tienen que tener como objetivo llegar a un sistema de residuo cero adoptando medidas de prevención, reutilización y reciclaje, y abandonando la incineración de los mismos.
El listado de las empresas más contaminantes se puede consultar en el informe de Greenpeace Contaminación en España disponible en www.greenpeace.es
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